Cada beneficiario de esta subvención ha obtenido una ayuda a fondo perdido conocida como Cheque Vivienda, de 9.000 euros, además de un pósito de 6.000 euros a devolver en seis años sin intereses. En total 15.000 euros concedidos por el Ayuntamiento que podrán destinar al pago de los gastos que conlleva la adquisición de una casa, como la formalización de escrituras, la entrada, el pago de la hipoteca o incluso la adquisición del mobiliario.
El Alcalde de Palos de la Frontera, Carmelo Romero, junto a la Concejal de Desarrollo Local, Gemma Domínguez, hacía entrega de estas ayudas, con la satisfacción de poder ofrecer a
los jóvenes del municipio un respaldo económico con el que hacer más accesible la compra del bien más relevante y apreciado por los jóvenes, su propia casa.
A estas ayudas hay que sumar un amplio programa de prestaciones sociales habilitadas por el Consistorio, como la bonificación de 105 euros mensuales sobre el recibo del préstamo hipotecario o la bonificación del 50% en las tasas de enganche de agua.
Además, hay que señalar la intensa política en el área de vivienda de protección oficial que el equipo de gobierno del Ayuntamiento esta llevando a cabo durante los últimos años.
Antonia y Verónica tienen 38 y 35 años de edad y viven juntas de alquiler desde hace siete años en un piso en Palos de la Frontera.
La joven pareja decidió echarse adelante en la compra del piso en el que viven, empujadas -en gran parte- por las facilidades que el Ayuntamiento de la localidad ofrece a los jóvenes a la hora de afrontar los gastos que conlleva la adquisición de una vivienda en propiedad.
En declaraciones a Palos Punto Cero, Antonia y Verónica cuentan que a pesar de que ahora mismo tienen que hacer un poquito más de esfuerzo económico que antes de comprar la
vivienda, lo cierto es que “emocionalmente hemos ganado muchísimo, en tranquilidad y en estabilidad al saber que ya la vivienda es nuestra, cosa que en nosotras tiene muchísimo valor”.