El alumno del IES Fuente Juncal, que actualmente cursa 2º de la ESO, fue uno de los 10 finalistas y premiados, de entre los 235 participantes de toda Huelva, en la fase provincial de la XXXVII Olimpiada Matemática Thales. De dichos 10 finalistas, 5 fueron seleccionados para representar a Andalucía en la fase nacional y Darío no estuvo entre ellos, lo que no resta nada de brillo al logro conseguido y por el que Aljaraque Punto Cero le da la enhorabuena. Como anécdotas, cabe destacar que su madre, María del Mar Rodríguez Franco, también participó en esta olimpiada cuando tenía la edad de Darío, y que el joven estudiante es un excelente alumno en el instituto, y ya en Primaria fue condecorado con una Mención Honorífica al finalizar 6º curso en el CEIP Antonio Guerrero.
“Cuando me comunicaron que era finalista, me sentí bastante bien. Al salir de la prueba escrita, yo decía que lo había hecho mal, pero cuando supe que estaba entre de los 10 primeros, me cambió la mentalidad y comencé q pensar que, incluso, debería haberlo hecho mejor.
Si soy sincero, al principio dije que no quería participar, pero me convencieron, sobre todo mi madre, que participó cuando era pequeña, al igual que mi tío Juan. Finalmente, la experiencia fue muy positiva y disfruté con algo que me gusta, las matemáticas, y pasando un gran día con mis compañeros y alumnos de otros centros.
Cuando se enteraron de mi pase a la final, mis compañeros me dieron la enhorabuena y mis mejores amigos me insistieron mucho en el hecho de que aunque al final no hubiese quedado entre los 5 primeros, ya era todo un logro quedar entre los 10 mejores de un total de 235 participantes. Mis profesores, de todas las asignaturas, también me felicitaron y me dijeron que se sentían orgullosos de mí.
Con respecto a mi afición por las matemáticas, he de decir que me han gustado desde pequeño. Las letras me gustan algo menos. Creo que esta afición por los números puede venirme por los juegos de mesa. Desde pequeño, siempre he tenido juegos educativos, como el Monopoly, donde tienes que estar haciendo cuentas y contando dinero. Por ello, desde siempre tengo muy claro que me gustan los números y mi deseo es, en un futuro, estudiar alguna ingeniería.
Para finalizar, diría que el participar en la Olimpiada Matemática es algo que, sin duda, recomendaría, pues es una experiencia muy bonita y sólo se puede vivir, como mucho, dos veces en la vida, pues participan los alumnos de 2º de ESO y de 2º de Bachillerato. Además, aunque alguien, de primeras, no quiera ir porque lo vea un gran reto, como me pasó a mí, yo creo que en esta vida hay que atreverse a superar obstáculos. Al fin y al cabo, la vida son momentos, y en ese aspecto, este reto que he superado me ha enseñado mucho, por lo que la experiencia no puede ser más positiva”.
“Del IES Fuente Juncal fueron 6 alumnos a la Olimpiada Matemática, quedando Darío como único clasificado de nuestro centro para la final. Creo que este evento es una manera muy positiva y estimulante de que el alumno vea que las matemáticas no son sólo lo que se da en el aula. Además, para personas con altas capacidades, como es Darío, es un estímulo, pues se sienten recompensados con este tipo de actividades.
Al principio, Darío no quería ir al evento, al igual que sus otros compañeros que acudieron. Son cosas de la edad, y este tipo de actividades pueden darles algo de vértigo e infundirles temor al fracaso y a no hacer las cosas bien. En clase los estimulamos y se convencieron de que eran capaces. Finalmente, acudieron, lo hicieron bien y pasaron un excelente día de convivencia. Además, comprobaron, como he comentado antes, que las matemáticas son algo más que lo que se da en el aula. Las mismas pruebas escritas de la Olimpiada Matemática eran problemas cotidianos, muy prácticos, adaptados a ellos. En este sentido, creo que este evento es muy positivo para los alumnos, pues les permite saber hasta dónde pueden llegar por sí mismos, además de enfrentarse a retos que tienen que ir solventando paso a paso. Conforme más se avance, más confianza obtienen en sí mismos. A fin de cuentas, esto es algo que a los adultos también nos ocurre.
Para finalizar, me gustaría decir que Darío es un alumno excelente, que accede a todos los retos que se le plantean en clase y siempre buscar ir más allá”.