El Comité de Sequía para Huelva aprueba una reducción a la restricción al riego destinado a los cultivos del 50% al 25%, lo que permite mirar con más optimismo el cierre de la campaña actualmente en curso. Regantes y agricultores siguen reivindicando las infraestructuras hidráulicas que permitan la supervivencia del sector
El Comité de sequía en Huelva aprobaba por unanimidad hace unos días el descenso del recorte a las dotaciones de riego del 50% al 25 %, en relación al agua destinada para la agricultura. También se aprobaba una reducción (del 10% al 5%) en el caso del abastecimiento y la industria.
Y es que a raíz de las últimas lluvias se han podido embalsar 75 hm³, aunque la falta de infraestructuras hidráulicas, como la no finalización de la Presa de Alcolea, ha hecho que se vayan al mar más de 200 hm³ de agua. Una cantidad que hubiera solventado el problema de la falta de agua que el sector agrícola onubense padece desde hace años. De esta manera, y por poner en contexto, son varias las infraestructuras que regantes y agricultores vienen demandando desde hace años. Infraestructuras que están aprobadas en el actual Plan Hidrológico (con vigencia desde el año 2021 hasta el 2027). Unas infraestructuras que en buena medida dependen del Gobierno Central y que en muchos casos aún no han empezado. Hablamos de obras tan importantes como el desdoble del túnel de San Silvestre, la citada Presa de Alcolea o Boca Chanza I y II. Unas obras que, insisten los profesionales del sector, permitirían mantener el sistema Huelva, no hacer ampliaciones de regadíos.
De esta manera, representantes de las organizaciones agrarias onubenses, además de la Asociación de Comunidades de Regantes de Huelva (Huelva Riega) se han congratulado del acuerdo adoptado en el Comité de Sequía para rebajar las restricciones de agua de riego. Así, Huelva Riega aplaudía esta decisión en un comunicado, que suscribían todas las comunidades de regantes adscritas, entre ellas la Comunidad de Regantes Piedras-Guadiana.
Aunque se trata de una buena noticia, agricultores y regantes apuntan que la sequía no ha terminado y que con las últimas lluvias se ha conseguido volver a la situación en la que se comenzó la campaña en 2023, en la que, como ahora, había una restricción al riego del 25%.
Así, los agricultores onubenses seguirán reclamando a las administraciones que palíen las necesidades estructurales que tiene la provincia en materia de infraestructuras hidráulicas, la mayoría de ellas contempladas en el Plan Hidrológico 2021-2027, actualmente en vigor. Además, regantes y organizaciones agrarias onubenses se encuentran a la espera de que se renueve el Convenio de Albufeira, imprescindible para resolver la situación de los bombeos del Boca Chanza. Unos convenios que necesitan la firma bilateral de los gobiernos español y portugués. Las recientes elecciones en Portugal han demorado los encuentros en los que debía procederse a la firma de este acuerdo, que presumiblemente no debería dilatarse en demasía en el tiempo, merced al compromiso adquirido con regantes y agricultores por parte del Secretario de Estado de Medio Ambiente del Gobierno de España, Hugo Morán.
CONVENIO DE ALBUFEIRA
Cabe destacar que el citado Convenio de Albufeira, entre España y Portugal, está destinado a la administración y uso hídrico de las cinco cuencas hidrográficas que comparten ambos países. Y es que dicho acuerdo se firmó en 1998 y no se ha revisado. Este convenio contempla la posibilidad del aporte de agua desde el embalse de Alqueva, en la región del Alentejo de Portugal, en situaciones de sequía extrema como la actual. Todo ello teniendo en cuenta que dicha presa está obligada a desembalsar agua de forma periódica. Un agua que podrían aprovechar nuestros agricultores dada la situación actual. Como dato relevante, en la última semana de febrero, Alqueva desembalsó 45 hm³ de agua en un simulacro de crecida de la presa e inundación de los municipios colindantes. Y, casualmente, 45 hm³ es lo que consumen en un año los habitantes de la provincia de Huelva (hablando sólo de consumo humano). Además, según informa la Empresa de Desenvolvimento e Infraestructuras do Alqueva (EDIA), que gestiona el embalse de Alqueva, dicha presa “se encontraba al límite de su capacidad en el momento del desembalse”.
La importancia de los Bombeos de Boca Chanza, gracias a los aportes de la presa de Alqueva, reside sobre todo en el hecho de que a partir de los meses de mayo y junio, con la sequía estival característica de cualquier clima mediterráneo, las aguas de las lluvias dejan de correr y el agua del mar va tomando fuerza en las tierras próximas a la costa. Esto hace que aumente el tapón salino y que gran parte de las aguas de Boca Chanza pierdan calidad, al aumentar la salinidad. No obstante, con la presa de Alqueva desembalsando agua desde el norte, pues recordemos que tiene que desembalsar por normativa de forma periódica, el tapón salino es arrastrado aguas abajo, permitiendo a nuestros agricultores obtener agua óptima para el riego gracias a los bombeos de Boca Chanza. F
altan muchas gestiones e infraestructuras que acometer para que el sector agrícola onubense pueda respirar de forma definitiva, aunque la disminución de la restricción al riego recientemente aprobada es un soplo de aire fresco, que, si bien no soluciona el problema, al menos lo aplaza y da más margen de actuación a unos agricultores que mantienen vivo el sector gracias a un gran esfuerzo.
Álvaro Burgos Mazo, Delegado Territorial de Agricultura, Pesca, Agua y Desarrollo Rural:
“La situación después de las últimas lluvias se puede calificar de alivio, aunque sigue siendo preocupante el momento en que estamos. Es un alivio porque se han incorporado 75 hm³ a los embalses de Huelva con las últimas lluvias, lo que significa que tenemos, en los embalses de las cuencas Tinto-Odiel-Chanza y Piedras unos 770 hm³, aproximadamente, suponiendo eso el 50% de la capacidad total del sistema.
Como dato preocupante, una vez más, el hecho de que al no estar finalizada la Presa de Alcolea, durante la Semana Santa, por la cuenca del Odiel, hemos dejado escapar 113 hm³. Todo ello en una sola semana. Y desde enero de 2024 hasta el 31 de marzo del mismo año, se han escapado, también por la cuenca del Odiel, un total de 222 hm³, que es la cantidad que consumen los usuarios de toda la provincia de Huelva en un año. Con lo cual, hemos perdido en tan sólo 3 meses el agua que se consume en un año entero.
Esto pone de manifiesto, de nuevo, la necesidad de que el Gobierno de Sánchez apueste por Huelva y sus sectores productivos, de tal forma que cumpla con la planificación hidrológica, con la Ley 10/2018 y ejecute de una vez por todas el desdoble del túnel de San Silvestre, la Presa de Alcolea y el canal de Trigueros. De lo contrario, y de persistir la sequía, el corto plazo, con el agua de que disponemos, está garantizado, pero el medio y largo plazo corren peligro para sectores tan importantes como la agricultura, la industria, el turismo y la minería, que son el sustento de la mayor parte de la provincia de Huelva”.
José Muriel Madrigal, ‘Pepe Lena’, Agricultor de agrícola lena y alfrut y presidente de la comunidad de regantes piedras-guadiana:
“Estábamos con la soga al cuello, totalmente asfixiados. La reducción de la restricción del riego al 25% nos supone poder terminar la campaña de berries, cosa que hace un mes no podíamos ni pensar. Esto es un alivio, pero no hay que olvidar que ahora estamos en la misma situación que el año pasado por estas fechas en cuanto a capacidad de agua almacenada.
Todo lo anterior no quita el hecho de que dentro de cada comunidad de regantes, la normativa de sequía se sigue manteniendo porque lo cierto es que seguimos en sequía. Tendría que llover mucho o que las infraestructuras hidráulicas como Alcolea, los bombeos de Bocachanza, etc., estuviesen finalizadas para que el problema estuviera solventado.
Por todo ello, la supervivencia del sector está siendo posible gracias al esfuerzo de los agricultores y comuneros. En todas las reuniones y asambleas que tenemos, agradezco mucho los sacrificios que hacen y el control y eficiencia que llevan en sus riegos. Es algo que facilita mucho el funcionamiento de una comunidad de regantes”.
Compartir
Visita o descarga la versión en PDF de Periódicos puntocero