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Nuestra protagonista del mes en ‘MVP Cartaya’ es Mamen Ramos, una deportista local a quien podemos describir como una ‘luchadora con mayúsculas’. Lleva más de 12 años cosechando éxitos al más alto nivel en lucha libre olímpica, una exigente disciplina deportiva que requiere las mismas dosis de fuerza que de técnica y en la que el esfuerzo y la preparación de muchos meses pueden decidirse en apenas 6 minutos.
Suele decirse que el fútbol es un deporte de contacto, en el que hay situaciones de cuerpo a cuerpo, entradas duras o algún que otro codazo. Pero esta afirmación puede resultarle un poco exagerada a nuestra MVP del mes de septiembre. Y es que Mamen Ramos Díaz (Cartaya, 2001) lleva más de una década dedicada al cien por cien a la lucha libre olímpica, un deporte en el que el éxito pasa por derribar a tu adversaria usando distintas llaves y técnicas de proyección y donde está prohibido cualquier tipo de golpe o impacto.
En esta entrevista nos cuenta un poco más sobre sus inicios y nos explica cómo se prepara para las competiciones de alto nivel y qué tipo de valores le ha aportado este deporte en su vida.
–Eres una persona que ha practicado deporte desde niña, pero ¿por qué una disciplina con tantas peculiaridades y exigencias como la lucha libre?
Efectivamente, desde pequeña siempre he practicado actividades deportivas. Hasta los 11 años jugaba al fútbol, y estaba contenta. Pero un amigo que practicaba lucha libre me animó a probar. Lo hice y me di cuenta de que era lo mío. De eso hace ya doce años y no he parado.
-¿Qué fue lo que te atrajo de la lucha libre olímpica?
Siempre me han llamado la atención los deportes de contacto. En un primer momento puede parecer un deporte violento, pero nada más lejos de la realidad. Aquí no hay golpes.
– Por tu trayectoria y éxitos conseguidos parece que te lo tomaste en serio
Sí, no me pesaban en absoluto los entrenamientos y los esfuerzos. Además, llevo compitiendo a nivel internacional y nacional desde los 15 años. El primer Campeonato del Mundo al que asistí fue en 2022, y he participado igualmente en tres europeos. También soy campeona de los Juegos Mediterráneos en mi categoría.
– En este deporte se compite por edad y peso ¿en qué categoría estás actualmente?
Efectivamente. Hasta el año pasado estaba en sub23. Por edad, he pasado esta temporada a sénior de 65 kilos
– Pero entonces, la alimentación, el cuidado y el entrenamiento son vitales en este deporte ¿no?
Sí, son aspectos muy importantes que hay que cuidar. Durante las temporadas de competición hacemos bajadas de peso, así que la alimentación es bastante estricta. Fuera de temporada, mantengo una dieta saludable, pero me permito algunos caprichos, como una chocolatina de vez en cuando, como cualquier persona.
– Puede parecer que tus medallas en campeonatos internacionales son las más importantes. Pero hay que destacar que detrás de ellas hay un largo recorrido en competiciones autonómicas y nacionales.
Sí, quizás los dos oros y la plata que he conseguido fuera de España son las que más repercusión han tenido. Pero no puedo olvidar que durante mi trayectoria en todas las categorías inferiores he sido campeona de Andalucía en 16 ocasiones y campeona de España en 13.
– De todos esos grandes logros ¿cuáles destacarías?
Sin duda, ser campeona de España en categorías sub-17, sub-20 y senior es de lo más destacado. Este último año más si cabe, ya que cambié de categoría de peso, y aun así logré buenos resultados.
– Y todo esto desde tu club de Cartaya, en el que además eres entrenadora.
Sí. Desde que terminé mi formación en la rama del deporte, entreno al grupo de los pequeños. El club lleva unos 6 años y me ha aportado mucho para avanzar en este deporte. El ambiente es muy sano y la gente más joven viene con mucha fuerza, lo que te impide bajar el ritmo o desmotivarte. Además, regularmente se organizan combates de entrenamiento con otros clubes, que también sirven a la federación para ver nuestro nivel.
– Y en cuanto a instalaciones y apoyos ¿como valoras las oportunidades que ofrece el municipio?
En ese aspecto estoy contenta. Podemos entrenar en instalaciones adecuadas y tenemos apoyo institucional. Pero es verdad que nos vendrían bien algún tipo de patrocinio. Sobre todo cuando hay que asistir a los campeonatos, que suponen un gran gasto en desplazamientos y hoteles.
– ¿Qué próximos objetivos tienes en mente para esta temporada?
Mis principales objetivos siguen siendo el Campeonato Europeo y Mundial. Después de los resultados en estas competiciones en diferentes categorías, es el techo que me marco. Además, siempre busco mejorar y superar mis marcas.
– Háblanos un poco de cómo es entrenar en un club con más hombres que mujeres. ¿Cómo lo llevas?
La verdad, lo llevo muy bien. Los chicos que entrenan son muy competitivos y vienen con mucha energía, así que es motivante. También tengo sobrinas que están empezando, lo que es genial porque me encanta ver a más mujeres en el deporte.
– ¿Qué tipo de valores crees que te ha aportado la lucha libre olímpica?
Además del esfuerzo y los sacrificios que conlleva cualquier deporte que se practique a un nivel alto, la lucha libre te inculca el respeto en todos los sentidos. Respeto a tu rival, respeto a tu entrenador y respeto hacia ti misma.
– Por último, ¿cómo animarías a la juventud, y en especial a las chicas, a practicar lucha libre olímpica?
Les diría que es un deporte muy completo. No solo es físico, sino que también te enseña a ser responsable con tu cuerpo, tu alimentación y tus entrenamientos. Además, te hace madurar mucho como persona y te enseña a valorar las oportunidades.