La ciudad de Ayamonte se prepara para vivir con intensidad las fiestas patronales en honor a su Patrona y Alcaldesa Perpetua, la Santísima Virgen de las Angustias Coronada, cuya devoción se remonta a siglos de historia. Junto al programa festivo se desarrollan a lo largo de las próximas semanas los actos litúrgicos, que comenzaron el pasado domingo con la Antigua y Tradicional Bajada de la Virgen de su camarín.
Este primer acto volvió a convertirse en un momento cargado de emoción. Con gran solemnidad, la imagen fue descendida para ser “entregada al pueblo”, un gesto que simboliza la cercanía de la Patrona con sus hijos ayamontinos. “La bajada es un acto muy íntimo, muy ayamontino. Los sacerdotes, el alcalde y el presidente de la Hermandad somos los custodios de la imagen durante todo el año y en ese día la entregamos al pueblo. Es el momento en el que los fieles tienen a la Virgen más cerca, incluso pueden llevarla en el hombro o tocarla directamente. Es un acto muy emotivo, entrañable y que llena de satisfacción a los ayamontinos”, explica el presidente de la Hermandad de las Angustias de Ayamonte, Francisco Hidalgo Gómez.
Tras la bajada, la Virgen ha quedado expuesta a su veneración en distintas capillas de la parroquia, una costumbre que busca reforzar los lazos con las hermandades de Semana Santa de la ciudad. “Cada año la Virgen se coloca en una capilla distinta, y este año está en la de la Hermandad del Miércoles Santo, la Hermandad de Excombatientes, junto a Jesús de la Pasión y la Virgen de la Paz. Es una manera de unirnos más, de reforzar la idea de que la Hermandad Patronal también es la hermandad de la parroquia”, señala Hidalgo.
El próximo domingo 24 de agosto se celebrará el Solemne Besamanos a la Patrona, que congrega cada año a centenares de devotos en un ambiente de intensa espiritualidad. “Es un día en que la Virgen está muy cerca de su pueblo, de once a dos por la mañana y de seis de la tarde hasta última hora. Es un día muy especial antes de que vuelva a su altar de culto para la novena. Incluso la misa de las nueve se celebra delante de la imagen, no en el presbiterio”, explica el presidente.
El martes 26 de agosto comenzará la Solemne Novena, que se prolongará hasta el 3 de septiembre. Cada día, a las 21.00 horas, se rezará el Santo Rosario, se celebrará la Eucaristía con homilía y se cantará la Salve. Este año la Hermandad ha optado por contar con tres predicadores distintos, en lugar de uno solo para toda la novena. “Cada sacerdote predica tres días, lo que la hace más atractiva para los fieles, que esperan con ilusión la llegada de cada predicador. Tenemos la suerte de contar con tres nombres de peso: José Manuel Romero, rector del Santuario Jubilar de la Virgen de la Peña; Longinos Abengózar, muy querido por los feligreses; y Emilio Rodríguez Claudio, vicario general de la diócesis. Es un plantel magnífico”, subraya el presidente.
Además, la novena contará con la participación de hermandades de penitencia y gloria, asociaciones religiosas, grupos parroquiales y colectivos vinculados a la vida cristiana. “La iglesia prácticamente se llena todos los días, porque hay quienes siguen la novena completa y quienes acuden acompañando a su hermandad o grupo. Es una experiencia comunitaria y de unidad”, destaca Hidalgo.
El domingo 7 de septiembre será el turno de la tradicional Ofrenda de Flores. Desde 2020, tras la pandemia, se celebra en dos turnos; por la mañana en el interior del templo y por la tarde en el atrio parroquial, con la participación de comitivas que parten desde la Plaza de España y la Plaza de San Francisco.
“El desdoble de la ofrenda fue una feliz idea surgida en pandemia y se ha consolidado como un acierto. Por la mañana pueden acudir guarderías, colegios, mayores o quienes no quieren vestirse de flamenca. Por la tarde se mantiene la ofrenda tradicional, con las comitivas y la ofrenda de nardos que lucirá la Virgen al día siguiente en su paso”, explica Hidalgo.
El Día de la Virgen
El lunes 8 de septiembre, festividad de la Natividad de María, Ayamonte vivirá su jornada más esperada. A las 12.00 horas se celebrará la Solemne Función Principal de Instituto, presidida por el vicario episcopal de la Costa-Andévalo, Juan Manuel Pérez Núñez, y concelebrada con sacerdotes de la localidad.
“Para mí la función principal es el acto más importante. Es cuando se renueva el voto que la ciudad de Ayamonte hace a su Patrona. Participan autoridades civiles y militares, hermandades, asociaciones y este año contaremos con el coro de cámara Santa Cecilia de Sevilla. Es una explosión de fe dentro de la parroquia”, comenta emocionado el presidente.
Ya por la noche, a las 21.00 horas, saldrá a la calle la Solemne Procesión de la Virgen de las Angustias, acompañada por hermandades, clero y autoridades. La Agrupación Musical Cristo de la Buena Muerte abrirá el cortejo, mientras que la Banda de Música Nuestra Señora del Carmen de Villalba del Alcor pondrá la nota musical al paso de la Patrona.
Este año, además, la procesión tendrá estrenos importantes. “Se completará el diseño original del paso de 1992 con cuatro nuevas maniguetas de plata de Villarreal, se estrenan los ropones de los acólitos, las túnicas del pertiguero, los ciriales, y se ha restaurado el manto de la Virgen. También tendremos un cuerpo de acólitos propio, formado por una veintena de jóvenes que se han ofrecido con ilusión. Son estrenos que enriquecen nuestro patrimonio y que queríamos que vieran primero los ayamontinos, antes incluso de la Magna Mariana de Huelva”, destaca Hidalgo.
Las celebraciones concluirán el sábado 27 de septiembre con la Eucaristía de Acción de Gracias y la Asamblea General de Hermanos. Será el cierre de un mes intenso en el que Ayamonte habrá vuelto a demostrar su fidelidad y amor a la Virgen de las Angustias.
“El día 8 de septiembre, Ayamonte se paraliza. Todo se detiene para volcarse con la Patrona. Es el día de la Virgen, y como decimos en el cartel, nada hay más importante para un ayamontino que acompañarla en la iglesia por la mañana y en la calle por la noche. Es nuestra identidad, nuestra fe y nuestro corazón”, resume Francisco Hidalgo.
Como conclusión, el presidente ha querido resaltar el papel de la juventud en la Hermandad. “Se habla mucho del relevo generacional, pero yo creo que ya se ha producido. Tenemos chavales de 18 y 20 años en la cuadrilla de costaleros, jóvenes en la priostía y en la junta de gobierno, y hemos formado un cuerpo de acólitos con 20 chicos que vinieron voluntarios. La Hermandad de la Patrona es un lugar donde la juventud está muy presente y eso es, sin duda, una señal de esperanza y orgullo para las tradiciones locales.”
